Todas las universidades deberían enviar a sus alumnos  a zonas rurales empobrecidas o barrios marginales urbanos al menos por uno o dos meses durante su educación. Deberían capacitarse para ver directamente  los problemas que los pobres deben afrontar.

En el pueblo donde Amma nació solo había un grifo para cerca de mil familias.    Cada persona podía llenar de agua, como máximo, un solo recipiente y eso requería una espera de la mañana a la noche. A veces no llegaba la vez y no se conseguía agua. A causa de estas experiencias, si Amma ve que un grifo gotea siente como si fuera su sangre la que goteara en lugar del agua. Podemos pensar, ¿cómo podemos evitar el derroche de agua? ¿a quién debemos recurrir para que nos dé una solución?

Entrevista de Salini Saksena de The Pioneer, diario en inglés, sobre el tema de porqué las escuelas y universidades deben ser gestionadas por organizaciones espirituales para educar a las generaciones jóvenes.

¿Cuál es la conexión entre espiritualidad y educación?

ǟʍʍǟ:  La verdadera educación solo se produce  cuando va a la par con el conocimiento espiritual. De lo contrario, la educación se reducirá a acumular información. En el mundo de hoy cualquiera tiene acceso a la información, todo está disponible en internet. Pero esa educación no transforma. Únicamente nutre el cuerpo, no el ser. La educación sin valores espirituales  solo sirve para crear máquinas de tamaño pequeño, medio y grande. La educación en valores espirituales transforma a los jóvenes en fuerzas altamente capaces e inteligentes de bondad, compasión y servicio.

¿Cuál es su objetivo?

ǟʍʍǟ: Mi vida es una ofrenda a la humanidad, a los afligidos y oprimidos. Como un río que no hace distinciones, estoy disponible para todos en cualquier lugar, amando y sirviendo a todos.  Puedes decir que este es mi objetivo, pero es realmente mi naturaleza.