El pasado 4 de octubre tuvo lugar en el Centre Civic Cotxeres de Sants (Barcelona) un programa público de Br. Shubamrita como celebración del 63 aniversario de Amma.

El encuentro incluyó una breve meditación guiada, una charla y el cántico de algunos bhajans (cantos devocionales de la India).

Asimismo, hubo un descanso en la celebración, durante el que los asistentes pudieron tomar algo de lo preparado por los devotos.

La charla de Br. Shubamrita versó sobre la figura de Amma. En ella Br. Shubamrita mencionó las palabras de Amma que dice que todos somos cuentas del mismo collar engarzados por el hilo del amor. A la celebración del cumpleaños de Amma este año fueron aldededor de 150.000 personas y el hilo de amor que unia a esas personas era Amma.  

28 enero, Kanya Kumari, Tamil Nadu – Bharata Yatra 2017

Amma dedicó el Ramayana Darshanam (exposición de pintura del Ramayana)  y el Bharat Mata Sadanam (Templo Bharat Mata o Madre India) en el Kendra de Vivekananda en Kanya Kumari. En la recepción que la ofrecieron, dirigiéndose a la muchedumbre reunida, dijo: “La cultura india es una antigua cultura que permanece vibrante y viva hasta el día de hoy. Su distintivo es la completa realización del Ser verdadero y la compasión pura hacia todas las criaturas. Ella nos enseña que todas las cosas en el universo son una manifestación diferente de la Verdad Suprema y por tanto deberíamos aprender  a respetar, amar y servir incluso a la más minúscula de las criaturas, viéndolas como una en nosotros mismos.

Amma está feliz viendo el crecimiento de un templo dedicado a una madre como ésta, la madre de la nación India, mediante los esfuerzos del kendra de Vivekananda. Este templo nos envía el mensaje poderoso de que cada uno de nosotros debería construir un templo de amor a nuestra nación en nuestros corazones. Tenemos una profunda deuda con la tierra y la cultura que nos ha hecho lo que somos. Esta tierra es nuestra madre. La cultura es nuestra madre. Si permitimos que esa conexión se pierda, nos perderemos, como una cometa cuya cuerda se ha roto. Debemos devoción, respeto y reverencia a nuestra madre. Solo así podremos considerarnos hijos ideales y virtuosos. Debemos ser capaces de trascender los retos de los tiempos modernos y seguir enraizados en nuestra cultura.